Tu salud es la mejor inversión que podrás hacer a largo plazo. Y puedes empezar hoy mismo.
Dicen que correr es de cobardes y ladrones. Si eso es cierto, vivimos en una sociedad llena de ellos… porque el running está muy de moda. Seguro que has notado que cada vez hay más gente que se pone sus deportivas y sale a trotar un poco por su barrio.
Lo mío no es el running, ¡socorro!
¡Que no panda el cúnico! Hay multitud de deportes o prácticas deportivas. Alguna será la tuya. Por ejemplo, hace poco hablábamos del Crossfit y el Body Pump, que están muy de moda. ¿Los conocías?
Si no, sigue leyendo. Quizá después de todo lo que te contamos decidas que es el momento de darle otra oportunidad a eso de correr.
Correr es sano
Hay que pensar en el futuro. Y hacer deporte es una apuesta segura para mantenerte sano a lo largo de tu vida. Algo tan sencillo como salir a correr te ofrece los siguientes beneficios:
- Refuerza el sistema inmunitario. Al hacer ejercicio aeróbico todo tu cuerpo se activa y entre otras cosas aumenta la oxigenación de tu sangre.
- Regula el nivel de insulina en sangre. Lo que ayuda a reducir la sensación de hambre.
- Mejora tu metabolismo. Correr, consume la grasilla que te sobra de ese sitio que sabemos y la convierte en músculo. Aumentar tu masa muscular hará que tu cuerpo consuma más energía, y con ello te sea más fácil perder algo de peso 😉
- Mejora el riego sanguineo. Y esto afecta muy mucho a tu rendimiento a nivel cerebral mejorando tus capacidades de concentración y memoria.
- Aumenta tu capacidad pulmonar. Para que respires más y mejor.
- Te hace feliz. Correr hace que tu cuerpo libere endorfinas, que son la droga que genera tu cuerpo cuando te sientes feliz.
- Regula tus ciclos vitales. Hacer deporte puede ayudarte a regular tus niveles de energía a lo largo del día y así poder conciliar el sueño antes (por si nuestros trucos para dormir antes no te funcionaron muy bien).
El running para novatos es ideal
Para salir a correr no necesitas ningún tipo de equipamiento especial, al menos no al principio. Sólo necesitas unas deportivas, un pantalón cómodo y una camiseta que estés dispuesto/a a sudar.
El calzado
Si vas a empezar a correr no te preocupes demasiado por el calzado, empieza por un recorrido corto y sal con la mentalidad de alternar correr y andar cuando veas que te falta el aire. Así que, para empezar a hacer tus pinitos con unas deportivas cualquiera te sirve. Ya más adelante, te podrás dar un caprichito con esas zapatillas tan chulas y caras que te gustan.
Todos empezamos siendo novatos
Al principio, todos somos novatos. Eso es así. Y cuando digo todos, es todos. Incluso los corredores profesionales, al principio, fueron novatos. Lo importante es que estás aquí, con esa curiosidad, esa vocecilla de fondo que te anima a empezar en esto del running. Y hay algo que debes saber, correr es muy agradecido. Con un poco de dedicación verás un progreso espectacular.
Consejos para el runner novato
En esto del running, como en casi todo en la vida, es importante estar informado. Así que aquí te traigo unos pocos consejos para guiar tus primeras zancadas en esto del correr.
Olvídate del tiempo
Al principio no debes preocuparte por la cantidad de tiempo que le dedicas a correr o los tiempos que consigues corriendo; es mejor que tomes como referencia de tu rendimiento las distancias que hagas corriendo. No querrás batir el récord de velocidad o de distancia, ¿no?
De menos a más.
Debes ser consciente de que eres novato, así que tómatelo con calma. Empieza planteándote una distancia muy baja como meta. Por ejemplo, 1km. Tu primera meta será entonces correr tu primer kilómetro sin parar. Cuando lo consigas, súbelo a 2km. Y poco a poco ve aumentándolo hasta llegar a los 10km, que ya es una distancia más que razonable y de la que te podrás sentir muy orgulloso. Pero olvídate de los 10km, céntrate en tu primer kilómetro, y lo demás… ya vendrá.
Busca tu ritmo
Yo soy de los que se emociona en exceso corriendo. Empiezo a correr, estoy fresco y no noto el cansancio, así que empiezo a correr y correr, cada vez más rápido. Pero entonces, llega ese momento en que empiezo a darme cuenta del cansancio y ya es muy tarde. No cometas el mismo error.
Empieza corriendo muy lento. Tan lento como cuando andas, pero trotando. Puede que te sientas un poco tonto/a al principio, pero es mejor así. Cuando consigas cumplir tu meta (ese primer kilómetro) podrás aumentar tu velocidad.
Crea una rutina
Elige un horario e intenta seguirlo. Para empezar, salir a correr 2 o 3 veces a la semana está muy bien. No te saltes ni una, intenta hacer caso omiso de las excusas que se te ocurran. Tú sal, sal y corre. Cuando vuelvas a casa, y después de tu merecida ducha te sentirás TAN BIEN.
Encuentra compañía
Esto es a título personal, si prefieres ir solo (sobretodo al principio porque te da vergüenza que te vean con la lengua colgando) hazlo solo. Pero, en cuanto puedas, busca compañía. Seguro que puedes engañar a algún amigo, familiar o vecino para que se apunte a tu aventura en el running. Esto te ayudará a mantener una rutina, te crearás un poco de obligación para no dejar a tu acompañante tirado. Y además te servirá, mucho, para encontrar tu ritmo.
El tiempo
No te preocupes por él. Al principio, con dedicar a esto de correr unos 20-30 minutos es más que suficiente. A medida que aumentes distancias irás aumentando el tiempo, así que tendrás que ir aumentando la velocidad poco a poco para hacerlo en un tiempo razonable. Al fin y al cabo esto es sólo un hobby y tendrás otras cosas que hacer y con las que perder el tiempo 🙂
Lleva un registro
Ya sea un lápiz y una libreta, un documento en tu ordenador o una app de esas que están tan de moda. Sea como sea, intenta llevar un registro. Deberás apuntar tiempo total, y distancia recorrida. Intenta, sobretodo al principio, anotar de alguna forma los tramos que hiciste corriendo sin parar. Verás como desde el primer día irás mejorando. Correr es muy agradecido, y en poco tiempo verás una gran mejora.
No abuses
Ante cualquier molestia deberás reducir la intensidad de tus entrenamientos o, si sigue, detener por completo el entrenamiento. Dale a tu cuerpo un descanso cuando te lo pida. Al fin y al cabo, eres novato. No vayas a quedarte novato para siempre por una lesión mal curada.
Sin vergüenza
No tengas vergüenza por tu aspecto o por tu estado físico. Si necesitas disminuir el ritmo, disminúyelo. Si necesitas detenerte, sigue tu entrenamiento andando. Está claro que te encontrarás en tu recorrido a mucha otra gente corriendo y es muy posible que la mayoría estén en mejor forma que tú. ES NORMAL. Tú acabas de empezar. Déjate la vergüenza en casa y céntrate en lo que haces. Estás re-encaminando tu vida por un sendero más sano. ¡Enhorabuena! Me siento orgulloso de ti.
Hidrátate
Mantener un nivel adecuado de hidratación será clave para sentirte más cómodo en tus entrenamientos. Una botellita de agua, o busca algún recorrido con fuentes de agua potable (y así también aprovechas para descansar, pillín).
Más allá del running
A medida que vayas adquiriendo un mejor estado físico verás que tus prácticas de running se harán más llevaderas. Ahora que eres todo un deportista, no descuides otras zonas de tu cuerpo. Ve añadiendo nuevos ejercicios básicos a tu rutina. Añadir unos abdominales, y unas flexiones pueden ser todo lo que necesitas. Al variar los ejercicios verás cómo tu aspecto físico mejora, y también tu nivel de satisfacción.
Cuéntanos
¡Espera, espera! No te vayas a correr todavía, antes cuéntanos qué te ha parecido el artículo. ¿Te vas a animar? Si te ha servidor, por favor, compártelo con tus amigos o familiares. Cambia sus vidas también.
Porque una vida sana, es una vida mejor.
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